El máximo goleador de la Eurocopa 2008 es una de las referencias del ataque de la selección española y uno de los goleadores más codiciados del panorama internacional. David Villa es un luchador incansable que vive por y para el gol. Ya sea como delantero centro, escorado a la izquierda o como segundo punta, Villa siempre mira al arco.

El Guaje (apelativo cariñoso para los niños en su tierra natal asturiana) es explosivo, rápido y un gran trabajador, que no duda en bajar más allá de su terreno favorito para ayudar al equipo. Su entrega y coraje en el campo le han convertido en uno de los favoritos del público, sin embargo su fuerte carácter le ha traído alguna que otra tarjeta no deseada.

Aunque es por naturaleza diestro, el jugador es hábil con ambas piernas una circunstancia que su padre, un minero asturiano atribuye a un contratiempo que si bien pudo acabar con su futuro como futbolista, le amplió cualidades. Con cuatro años, el Guaje se rompió la pierna derecha y como ni con escayola se alejaba del balón, su padre le enseñó a pegarle con la zurda.

El jugador de 28 años, que nació y creció como futbolista en el Sporting de Gijón, explotó definitivamente a su madurez deportiva en el Zaragoza, club en el que jugó entre 2003 y 2005. El Valencia hizo un gran esfuerzo económico para hacerse con sus servicios pero no se arrepentiría: en su temporada debut, Villa quedó a un gol de ser máximo goleador de la temporada. Tuvo que conformarse con ser el mejor artillero español, mérito que ha firmado en tres cursos hasta la fecha.

Al término de la temporada 2009/2010, se cumplieron los rumores que habían saltado un año antes, y Villa firmó con el FC Barcelona a cuya disciplina se unirá asaltar con la selección española el reto de Sudáfrica 2010.

El asturiano debutó con la Roja en febrero de 2005, en un partido de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA Alemania 2006. Su primera gran cita internacional no pudo empezar mejor para él, ya que anotó dos goles ante Ucrania. Y a pesar de la prematura eliminación de España en octavos ante Francia, Villa dejó una excelente tarjeta de presentación a nivel internacional.

Desde entonces, nunca ha faltado (salvo lesión o sanción) a una cita con la selección con la que ya acumula 36 goles, que lo sitúan como el segundo máximo goleador histórico de España… y a punto de alcanzar al líder de esta tabla, Raúl.

A pesar de los méritos y los focos, Villa siempre se resta méritos y atribuye sus éxitos personales al apoyo de sus compañeros. Y tiene muchas ganas para la cita de Sudáfrica 2010 donde quiere quitarse la espina de Alemania 2006.